El recuento de afectados por el escándalo de explotación infantil en nuestra ciudad ascendió a diez, según confirmó el encargado de la investigación Rodolfo Moure. Este viernes, se emitió una orden a Interpol para dar con su ubicación, junto con peticiones similares a Whatsapp y a la compañía asociada con el videojuego implicado.

Con la revelación de seis denuncias de explotación infantil en Balcarce, a través de un juego para teléfonos móviles el pasado miércoles Rodolfo Moure, fiscal asignado a la investigación, señaló que ya se solicitó una "aprobación" al Juez de Garantías "para obtener el testimonio de siete de las víctimas en Cámara Gesell".

La alarma se disparó cuando Moure alertó de la situación a la población a través de una conferencia de prensa, informando que hasta ese momento se habían registrado seis víctimas, todas ellas de entre 9 y 11 años, evitando dar los nombres de los establecimientos educacionales en los que se había descubierto el ilícito

En paralelo a la confirmación se supo de más víctimas, el fiscal informó que la investigación había progresado: "Continuamos con nuestras labores y se conocieron cuatro nuevos casos, lo que eleva el total a diez víctimas, todas de Balcarce".

"Este viernes se envió una solicitud a Interpol para pedir su ayuda, otra a Whatsapp y finalmente a la empresa asociada con el videojuego -Freefire- para que nos proporcione toda la información que requerimos", declaró.

"Además, hemos pedido al Juez de Garantías autorización para obtener el testimonio en Cámara Gesell de siete de las diez víctimas, que son las más significativas. Estos son los avances más relevantes hasta el momento", concluyó el fiscal.

En este caso, los depredadores ofrecían a los niños, a través de la comunicación en el videojuego, diamantes -la moneda del Free Fire que se utiliza para adquirir nuevos artículos-, a cambio de imágenes indecentes por WhatsApp.

Posteriormente, cuando los menores se rehusaban a enviar dichas imágenes, esta red los chantajeaba con la amenaza de informar a sus padres o de difundir las fotos que ya habían obtenido, tal como describió el jefe de la sub-DDI Balcarce, Maximiliano Blanco Ríos en conferencia de prensa.

Respecto al motivo de la comunicación con las autoridades de Whatsapp, aunque reconocieron que se trata de una línea internacional, aún no habían podido determinar desde qué lugar específico están operando.

Finalmente, es importante destacar que este incidente se hizo público después de que una madre compartió la situación en la escuela y otras familias revelaron que habían experimentado circunstancias similares, las autoridades de distintos establecimientos educativos siguen muy de cerca el caso.