El exsecretario de Comercio y actual dirigente nacional del partido Principios y Valores, Guillermo Moreno, fue entrevistado en exclusivo por GABAL y dejó una serie de definiciones políticas tras el reciente fallo judicial que confirmó la condena a la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner. “Se metieron con una viuda. Ahora hay viuda y presa. Es demasiado”, expresó, al tiempo que consideró que esta situación está despertando nuevamente al movimiento peronista: “El portaaviones se puso en marcha”.
Durante el diálogo, Moreno destacó que el peronismo reaccionó con fuerza ante la decisión judicial contra la exmandataria. “Las tripas empezaron a indicarte el camino, se empieza a construir una conciencia colectiva”, dijo, aludiendo a una respuesta emocional. En ese sentido, se refirió a la reunión de distintos sectores del peronismo que tuvo lugar recientemente: “Sirvió para darle direccionalidad. El movimiento está de pie, va a empezar a caminar y después hay que aguantársela”.
El dirigente también reveló que estuvo reunido con Cristina esta semana, en su casa: “La vi muy bien, reflexiva, tranquila. Diría que vi la mejor Cristina desde que la conozco”, expresó, y compartió una anécdota que dejó entrever la familiaridad del encuentro: “Me olvidé la boina y su secretario me llamó para decírmelo. Me descolocó, pero así es el peronismo”.
Sobre el futuro electoral del espacio, Moreno insistió en que “el peronismo se está rearmando” y apuntó contra el gobierno de Javier Milei: “Estamos en manos de muchachos que no tienen idea de este oficio. Lo que dicen de que están ordenando la economía es falso”. En contraposición, sostuvo que en el peronismo “ya se están elaborando planes de gobierno, al menos en lo económico”, y señaló que volver al poder requiere tener claridad sobre cómo se quiere gobernar.
Consultado por otros dirigentes, tuvo palabras elogiosas tanto para Sergio Massa como para Máximo Kirchner. Del primero dijo que “sorprendió con un discurso soberbio” y del segundo destacó su capacidad para expresar lo que sentía: “Cuando dijo ‘perdí a mi papá, ahora a mi mamá, estoy solo’, más de uno se largó a llorar. Y no eran blanditos los que estaban ahí”.
También se refirió con respeto a Juan Grabois, quien en la reunión planteó su postura sobre el voto en blanco. “Es joven, las hormonas a veces van más rápido, pero fue tratado con respeto y lo trató todo con respeto. Así es el peronismo”.
Finalmente, dejó abierta la posibilidad de una simplificación del armado electoral: “Se está hablando de terminar con los nombres de fantasía y volver al frente justicialista, a secas. Lo importante es que la contradicción está clara: el modelo libertario rentístico o el modelo peronista de producción y trabajo”, cerró.
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