El intento por reinstaurar las reelecciones indefinidas en la provincia de Buenos Aires fracasó por falta de quórum y apoyo político. A pocas horas del plazo para convocar una sesión que permitiera tratar el proyecto antes del cierre de listas, en la Legislatura ya dan por cerrada la discusión.

El Senado había aprobado con polémica la iniciativa, en medio de críticas al accionar de Verónica Magario, quien desempató una votación sin habilitar un nuevo debate, como exige el reglamento. La maniobra fue cuestionada y dejó la votación al borde de la judicialización.

En Diputados, el rechazo fue aún más claro. El massismo se negó a apoyar una ley que contradecía su propio proyecto anterior, y ni La Cámpora ni el kirchnerismo lograron sumar los votos necesarios.

El apuro por aprobar la reforma, la exclusión de los intendentes en un primer momento y errores de procedimiento terminaron sepultando una iniciativa que, según reconocen dentro del oficialismo, “comenzó mal y terminó peor”.

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