El Gobierno nacional oficializó a través del Decreto 396/2025, una serie de reformas estructurales que incluyen la fusión del Instituto de Prevención Sísmica (Impres) con el Servicio Geológico Minero Argentino (Segemar), así como la transformación del Instituto Nacional del Agua (INA) en una unidad organizativa dependiente de la Secretaría de Obras Públicas.

La decisión forma parte de la política de reducción del Estado que impulsa la administración de Javier Milei, y responde al diagnóstico del Ministerio de Desregulación y Transformación del Estado, que advirtió un crecimiento excesivo en la dotación de personal de los organismos descentralizados: de 35.481 agentes en 2010 a 88.095 en 2024, lo que representa un incremento del 148%.

En este marco, la fusión entre Impres y Segemar ambos bajo la órbita del Ministerio de Economía apunta a "generar mayor eficiencia administrativa y funcional" en áreas con competencias técnicas convergentes como la geociencia, el estudio del subsuelo, la prevención de riesgos geológicos y desastres naturales. Según el Ejecutivo, esta integración permitirá centralizar capacidades, optimizar recursos existentes y mejorar la producción de conocimiento aplicado.

Por otro lado, la transformación del INA en una unidad organizativa busca simplificar la estructura administrativa y fortalecer la coordinación de políticas en infraestructura hídrica, alineando sus funciones con los objetivos del Ministerio de Economía y eliminando áreas de apoyo que ahora serán absorbidas por otras dependencias ministeriales.

Desde el Gobierno destacaron que estas medidas permitirán una gestión pública “más ágil, eficiente, transparente y orientada a resultados”, garantizando el uso racional de los recursos públicos sin afectar el cumplimiento de las funciones técnicas esenciales de los organismos involucrados.

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