El titular de la comisaría tercera de Mar del Plata, Nicolás Manno, y tres efectivos de la misma seccional fueron desafectados de la fuerza en el marco de una investigación por la desaparición de una denuncia vinculada a un ataque a balazos contra la vivienda de una mujer.

La medida se tomó luego de un allanamiento ordenado por la fiscal María Florencia Salas, en el que personal de Asuntos Internos halló la declaración de la víctima oculta en una gaveta de la dependencia.

Tras conocerse los resultados del operativo, el Ministerio de Seguridad bonaerense dispuso el apartamiento de Manno, del oficial de servicio y de dos integrantes del Gabinete Técnico Operativo. En su reemplazo fue designada Carla Alfonso, quien se desempeñaba en la Policía Local.

El caso comenzó la semana pasada, cuando una mujer denunció que su casa había sido atacada a balazos. En un primer testimonio negó enemistades, aunque mencionó conflictos esporádicos con su pareja. La fiscal Salas abrió una causa sobre ese vínculo, pero horas después la víctima recibió un mensaje intimidatorio dirigido a su padre, en el que le reclamaban una deuda y advertían que, de no pagarla, volverían a disparar.

La denunciante volvió entonces a la comisaría para ampliar su declaración y aportar audios y videos que señalaban a dos sospechosos. Ese nuevo documento, sin embargo, nunca llegó a la fiscalía. Al enterarse por otros medios, Salas abrió una segunda causa y ordenó el allanamiento.

La principal hipótesis es que los policías habrían actuado en connivencia con los responsables del tiroteo o intentaron favorecerlos, ya sea por vínculos personales o por un beneficio económico.

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