La Policía Bonaerense, en colaboración con la Dirección Antidrogas de la Policía Nacional de Perú, detuvo en la localidad de Pucusana, al sur de Lima, a Tony Janzen Valverde Victoriano, alias “Pequeño J”. El hombre, considerado el autor intelectual del triple femicidio narco en Florencio Varela, tenía pedido de captura internacional y era seguido de cerca a través de sus comunicaciones.

El procedimiento se concretó cuando el sospechoso se disponía a encontrarse con su mano derecha, Matías Agustín Ozorio, en una plaza del distrito Los Olivos. Ninguno de los dos llegó al punto de encuentro: Ozorio había sido arrestado previamente, y horas más tarde cayó “Pequeño J”.

Según fuentes de la investigación, Valverde Victoriano había ingresado de manera ilegal desde Bolivia, cambiando chips de celular y ocultándose en un camión de pescado para eludir los controles policiales.

Con esta detención, ya son nueve los apresados en la causa por el asesinato de Brenda del Castillo, Morena Verdi y Lara Gutiérrez, ocurrido el 19 de septiembre. Entre ellos figuran Magalí Celeste González Guerrero, Andrés Maximiliano Parra, Iara Daniela Ibarra y Miguel Ángel Villanueva Silva, trasladados al penal de Melchor Romero, además de Víctor Sotacuro Lázaro, capturado en Bolivia; Ariel Giménez, acusado de cavar la fosa; y Florencia Ibáñez, quien estuvo junto a su tío Sotacuro la noche del crimen.

La investigación sostiene que las tres jóvenes fueron engañadas con la promesa de asistir a una fiesta en el barrio porteño de Flores. Sin embargo, fueron trasladadas hacia otro destino, donde fueron torturadas, asesinadas y enterradas, en un hecho transmitido parcialmente en vivo a través de redes sociales.

El ministro de Seguridad bonaerense, Javier Alonso, describió a “Pequeño J” como un criminal “sádico y terriblemente cruel”, que buscaba ampliar el negocio del tusi desde el Bajo Flores hasta Florencio Varela. Su captura en Perú marca un paso clave en la investigación de un caso que conmocionó al país.