En la mañana de este viernes, frente a la Estación de Policía Comunal, se llevó a cabo el acto conmemorativo por los 204 años de la creación de la Policía de la provincia de Buenos Aires, en una ceremonia cargada de simbolismo institucional y reconocimiento al servicio prestado a la comunidad. La actividad reunió a autoridades, jefes policiales, efectivos, familiares e invitados especiales, en un marco de respeto y solemnidad.

El inicio estuvo marcado por el ingreso de las autoridades y la formación policial, seguido por la entonación del Himno Nacional Argentino. Posteriormente, se realizó un emotivo minuto de silencio en memoria de los efectivos caídos en cumplimiento del deber, un momento de profundo recogimiento que reforzó el significado de la fecha y el compromiso que implica la función policial.

El acto fue presidido por el jefe de la Policía de Seguridad Comunal de Balcarce, comisario Catriel Lemmo, acompañado por responsables de las distintas dependencias con actuación en el distrito. También participó el presidente del Honorable Concejo Deliberante, Agustín Cassini, quien acompañó la jornada con su presencia institucional.

Durante su mensaje, Lemmo destacó la historia de la fuerza bonaerense, nacida en 1821, y subrayó el rol que la institución cumple en la actualidad, haciendo hincapié en la vocación de servicio, la profesionalización permanente y el trabajo articulado para fortalecer la prevención y el cuidado ciudadano. “Cuando hablamos de vocación, hablamos de un llamado. Un llamado interior que nadie hizo, pero al que ustedes respondieron para ayudar al prójimo y servir a la comunidad”, expresó.

En ese sentido, remarcó que los reconocimientos entregados durante la ceremonia buscan poner en valor el esfuerzo cotidiano del personal policial y fortalecer el orgullo personal y familiar de cada efectivo. “Queremos que puedan llevar estos reconocimientos a sus casas, mostrarlos con orgullo a sus familias y sentir que el esfuerzo diario realmente vale la pena”, señaló.

Asimismo, subrayó la importancia del compañerismo y del cuidado mutuo dentro de la fuerza, al afirmar que existe “una obligación moral que va más allá de lo legal, que es la de regresar a nuestros hogares”. Agregó que el verdadero orgullo institucional no solo se construye desde el cumplimiento de la ley, sino también desde el acompañamiento entre compañeros para volver sanos y salvos a casa luego de cada jornada.

Uno de los momentos centrales del acto fue la entrega de distinciones a efectivos de diversas reparticiones —Seguridad Comunal, Comisaría de la Mujer y la Familia, Comando de Prevención Rural, SubDDI, Destacamento Vial, Drogas Ilícitas y Policía Científica— que se destacaron a lo largo del año por su desempeño, compromiso y dedicación. Cada reconocimiento puso en valor tareas específicas, muchas de ellas desarrolladas en contextos complejos y de alta exigencia.

La ceremonia incluyó además una invocación religiosa a cargo del padre Juan Marcos, quien reflexionó sobre la historia y el presente de la institución policial. “Cuando hablamos de 204 años no hablamos solo de una institución sólida, sino de personas que pasaron, que están y que vendrán: algunos hicieron las raíces, otros el tronco, otros las hojas, y hoy vemos los frutos que serán reconocidos”, expresó.

Durante la bendición, el sacerdote elevó una oración por los hombres y mujeres que integran la fuerza, por quienes se encuentran en actividad, por los heridos en cumplimiento del deber, por el personal retirado y por aquellos que dieron su vida al servicio de la comunidad. También tuvo palabras para las familias policiales, destacando su acompañamiento silencioso y permanente, antes de bendecir las distinciones entregadas durante la ceremonia.

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