Andrés Herrera, el joven que fue detenido el pasado día por estar acusado de abuso sexual infantil contra un niño de 7 años, habló con el medio Informese Primero sobre los momentos previos a su detención y sus sensaciones tras recuperar su libertad por disposición de la Justicia. En las últimas horas, la Justicia resolvió que no existían pruebas suficientes para mantenerlo detenido.

"Me venían notificando, sí, pero me hablaban de una investigación. Eso fue lo primero que me dijeron. Yo siempre tranquilo, trabajando día a día, todo normal, hasta que un día llegaron y me detuvieron. Desconocía el motivo. Nunca me imaginé que me iba a pasar algo así, la verdad, fue un balde de agua fría, sinceramente", relató Herrera.

Sobre las acusaciones de abuso sexual, Herrera expresó: “No tengo palabras para definir tal cosa, no encuentro la palabra. Es una mezcla de dolor con bronca. No soy una persona de tener una mente así, sería incapaz. Lo que más me duele es que me hayan hecho esto”.

El caso comenzó a ser investigado luego de que el niño ingresara al Hospital Municipal con signos de abuso. Tras una declaración en Cámara Gesell, se determinó que no había pruebas suficientes contra Herrera.

“Cuando a la criatura la llevaron a Cámara Gesell, por suerte dijo la verdad. Me comuniqué con mi abogada y ella me dijo que dijo toda la verdad”, dijo el joven, quien también explicó que durante su relación con la madre del menor, siempre trató al niño como un hijo. “Nunca jamás un reto, nada”, afirmó.

"Se me cruzan miles de cosas por la cabeza, solo Dios sabe por qué lo hizo. Nunca fui un tipo malo para que me haga esto", agregó.

Por último, Herrera reflexionó sobre la experiencia vivida y expresó: “Lo que me pasó a mí, no se lo deseo a nadie, ni a mi peor enemigo. Jamás estuve preso, es la primera vez que conozco una comisaría por dentro, la primera vez que entro a un penal”.

La investigación continúa mientras se busca esclarecer los hechos y determinar responsabilidades en el caso.

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