El jefe del Cuerpo Activo de Bomberos Voluntarios, Federico Mancini, habló con GABAL y señaló que el índice de incendios forestales se encuentra en nivel extremo y que esta situación se viene registrando desde hace varios días. “En estos días donde la temperatura es elevada, el índice nos está indicando riesgo extremo, producto de la combinación de altas temperaturas, bajo porcentaje de humedad en la vegetación y vientos por encima de los 30 kilómetros por hora”, explicó.
Mancini remarcó que este índice es una herramienta de prevención que permite anticipar escenarios complejos y alertar a la población. “La previsión meteorológica hace que la vegetación esté muy seca y eso aumenta significativamente el riesgo”, indicó, al tiempo que pidió extremar las medidas preventivas tanto en la vida cotidiana como en las actividades laborales.
En ese sentido, subrayó la importancia de la concientización como eje central del trabajo preventivo. “Siempre decimos que la prevención es la primera herramienta. Lo ideal es que las cosas no sucedan”, afirmó, y agregó: “La difusión y la información son fundamentales para generar conciencia en la comunidad y evitar que una acción mínima termine desencadenando un incendio forestal”.
El jefe del Cuerpo Activo hizo hincapié en que la mayoría de los incendios se originan por conductas humanas. “Muchas veces somos las personas las responsables de este tipo de siniestros, por impericia o negligencia”, señaló, y ejemplificó: “Una colilla de cigarrillo o una quema mal controlada puede terminar con una sierra completamente incendiada”.
Al referirse al contexto local, Mancini advirtió que Balcarce cuenta con una gran cantidad de material combustible disponible. “Tenemos vegetación en casi toda la jurisdicción, el calor está, y lo único que falta es la fuente de ignición”, expresó. En ese marco, mencionó especialmente la zona de Sierra La Barrosa, cercana al radio urbano. “Es un sector que siempre tenemos muy presente porque representa un riesgo para las personas que viven allí”, explicó.
Sobre el uso del fuego para limpieza de terrenos, fue categórico: “El fuego no es un método de limpieza recomendado por la institución”, sostuvo. Y amplió: “Muchas veces una quema puede salir bien, pero hay factores que no se tienen en cuenta, como un cambio de viento, que pueden hacer que la situación se descontrole rápidamente”.
También advirtió que el fuego, una vez iniciado, puede cambiar su comportamiento. “Cuando el incendio toma intensidad, una ráfaga puede hacer que las llamas salten varios metros y superen un cortafuego”, explicó, y remarcó que la mayoría de las personas no cuenta con los recursos ni las herramientas necesarias para responder ante ese tipo de imprevistos.
Finalmente, Mancini se refirió a las proyecciones climáticas para el verano. “Se espera que las lluvias estén por debajo de la media, lo que hace que la vegetación que creció durante la primavera hoy esté seca”, señaló. Y concluyó: “Eso genera un escenario propicio para incendios de rápida propagación, con riesgo para personas, animales, propiedades y el ambiente. Nosotros estamos preparados para responder, pero lo más importante es evitar que el fuego se inicie”.
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