Los bonos soberanos de Argentina eran negociados con ganancia de 1,4% en promedio, según la referencia de los Globales en dólares en el exterior, que ya promedian en máximo de USD 71 en promedio, con un riesgo país que descontó 25 unidades, en los 610 puntos básicos, un mínimo desde el 8 de noviembre de 2018 (607 puntos). Por la tarde tocó las 608 unidades.
Los bonos soberanos de Argentina eran negociados con ganancia de 1,4% en promedio, según la referencia de los Globales en dólares en el exterior, que ya promedian en máximo de USD 71 en promedio, con un riesgo país que descontó 25 unidades, en los 610 puntos básicos, un mínimo desde el 8 de noviembre de 2018 (607 puntos). Por la tarde tocó las 608 unidades.
“Una vez más se confirma que los operadores continúan aprovechando cualquier descanso para reforzar sus apuestas en los activos domésticos, y así es que aún cuando venían intercalando algunos respiros rápidamente encuentran espacio para extender la escalada de cotizaciones”, afirmó Ber, quien diferenció la euforia por los activos domésticos de lo que ocurre en los mercados internacionales. “Wall Street arranca el 2025 con tono más cauto y volátil, luego de las fuertes subas de los últimos años, más allá de lo cual los estrategas continúan esperando mejoras en la nueva gestión de Trump a partir de la firme marcha de la economía y las utilidades corporativas”, afirmó.
Walter Morales, CEO y estratega de Wise Capital, subrayó que en Argentina “el superávit fiscal más la liberación del cepo aseguran que los bonos argentinos van a continuar subiendo, ya que nada impide que el riesgo país vuelva a los 380 puntos básicos que se exhibieron durante el gobierno de (Mauricio) Macri. Esto equivale a subas en dólares por arriba de 25%, el que seguramente se va a producir durante de 2025.
Hay que recordar que este mes habrá pago de capital de los títulos públicos Globales y Bonares, emitidos en agosto de 2020, en el marco de una reestructuración de deuda soberana por más de USD 100.000 millones con acreedores encarada por la administración de Alberto Fernández.
En diciembre, el Tesoro nacional dispuso a tal efecto aprovechar la liquidez en pesos del superávit fiscal para pasar a divisas parte de sus depósitos, para totalizar ahora depósitos por USD 5.698 millones, muestra de solvencia de las arcas públicas para honrar la deuda.
Según consultoras, esta cifra será suficiente para afrontar los pagos del primer mes del año, unos USD 3.100 millones, y le permite ya tener cubierta la mayor parte de los pagos previstos para el 9 de julio.
“Un dato a tener en cuenta es hasta cuándo se pueden comprar los bonos para cobrar el capital y el interés. Se pueden adquirir hasta el 7 de enero en 24 horas de plazo y el 8 de enero en CI (Contado Inmediato)”, aportaron los expertos de Rava Bursátil.
Un informe de GMA Capital expresó que “los bonos en dólares experimentaron un año apoteótico. Con un retorno promedio de un 100% en moneda dura, fueron una de las perlas del mercado internacional. El increíble año de la deuda argentina se reflejó en la curva de rendimientos, la cual se encuentra casi plana en torno al 10%. Así, habiendo dejado atrás países como Ecuador, Argentina pasa a sentarse en la mesa de nombres como Pakistán y Angola, que coquetean con los rendimientos de un dígito”.