En los últimos días, se rumoreó que “El espejo de Agua”, de Villa Laguna Brava, estaría en niveles altos de contaminación por cianobacterias y para clarificar la cuestión, el ingeniero y miembro del Club de Pesca, Nazareno Pérez, estuvo de visita en los estudios de GABAL, donde amplió el panorama sobre este tema.

“Las bacterias existen en el mundo, antes que la humanidad, con lo cuál no podemos hacer nada en contra de eso. Dentro de estas bacterias, hay una en particular que la microbiología las denomina: cianobacterias. Son microorganismos que realizan fotosíntesis, al igual que las plantas, pero que viven en el agua. Al realizar esta fotosíntesis, despiden un ácido (cianhídrico) que es letal para los peces”, explicó en primer lugar Pérez.

Con relación a la forma de poder controlar la proliferación de las cianobacterias, Pérez, sostuvo: “una de las formas es el viento. Los humanos no podemos hacer nada. Este tipo de bacterias son anaeróbicas, con lo cuál se multiplican cuando no hay aire. Al haber viento que genera olas, hace que la cantidad de bacterias o el medio para que se multipliquen no sea próspero y mueren. Otra forma de crecimiento es la temperatura: a mayor temperatura, más crecen este tipo de bacterias”.

Además, Pérez agregó: “la ola polar que estamos atravesando ayuda para esperar una baja en la cantidad de cianobacterias”.

Por otra parte, Pérez, señaló que la Provincia monitorea varias lagunas del territorio bonaerense, entre ellas la de nuestra ciudad: “ellos monitorean todo el tiempo la laguna. Se hace una lectura quincenal de cuánta es la población de cianobacterias. En la última lectura, los valores de cianobacterias dieron más altos que lo normal. Un sector de la laguna está 'en amarillo'. Quiere decir que es una alerta. La explicación puede ser, esa elevación en la temperatura que tuvimos a fines de mayo, principios de junio y que hizo que aumentara la población de cianobacterias”.

Acerca del impacto de las cianobacterias en los humanos, Pérez, explicó: “la lectura sólo marca que hay más cianobacterias que las normales. Hay que determinar si son tóxicas o no. Si en la próxima lectura, el alerta asciende a color rojo, se toma una muestra del agua y se analiza para determinar qué tipo de cianobacteria está proliferando. Si es agresiva, se regula el acceso a la laguna. En el nivel en el que están las cianobacterias, no le provocan nada al humano, pero en caso de estar en contacto con ellas, hay que lavarse las manos rápidamente con un medio ácido como un limón o vinagre para frenar el crecimiento de las cianobacterias”, concluyó.