El Senado sancionó este jueves la ley que implementa cambios penales sobre la reincidencia y reiterancia para desactivar, según palabras del propio Gobierno, la denostada “puerta giratoria” de delincuentes.
La iniciativa obtuvo 67 adhesiones en la votación en general -unánime- y a los pocos minutos avanzó con la particular, donde el kirchnerismo rechazó solo algunos artículos.
La flamante ley apunta a reforzar las herramientas legales para prevenir la reincidencia y la reiterancia delictiva a partir del establecimiento de criterios claros para restringir la libertad en función de los antecedentes penales y el riesgo de nuevas conductas delictivas. Define como “reincidente” a quien haya sido condenado dos o más veces a penas privativas de libertad, siempre que la primera condena esté firme.
Busca que, al evaluar la posibilidad de otorgar la excarcelación a un imputado, los jueces consideren la existencia de múltiples causas penales en trámite como un indicio de riesgo procesal. Es decir, si una persona está siendo investigada en varias causas por delitos que conllevan penas privativas de la libertad, esta situación podría ser interpretada como una señal de que, al recuperar su libertad, el imputado podría intentar eludir a la justicia.
Previo a la sesión, el Comité Nacional para la Prevención de la Tortura advirtió: “Si se aprueban estas iniciativas se agravará el hacinamiento en los lugares de detención. Entre 2016 y 2023, la cantidad de personas privadas de libertad en cárceles creció en un 48,5%”.
Te puede interesar: